El Dr. Pere Caminal Magrans, fue Catedrático de la Universitat Politècnica de Catalunya y segundo director del CREB UPC.
1. Introducción
La ingeniería biomédica combina los criterios de diseño en ingeniería y las herramientas de análisis provenientes de las matemáticas, la física y la química persiguiendo la resolución de problemas en áreas como la medicina, biología, biotecnología y farmacia. Podría definirse, brevemente, como la aplicación de los principios de la ingeniería a las ciencias de la vida. En este artículo se recoge la trayectoria del Dr. Pere Caminal Magrans, uno de los pioneros e impulsores de la ingeniería biomédica en España y sin el cuál, no habríamos llegado hasta el momento actual.
A continuación se presenta un breve resumen de los primeros 25 años de la Ingeniería Biomédica en España, considerando análisis que se publicaron, sociedades científicas, congresos, estructuras de investigación, publicaciones, actividades docentes, y para finalizar algunas experiencias personales.
2. Primeros análisis de la Ingeniería Biomédica en España
El interés por la Ingeniería Biomédica en España fue analizado en 1978 por J. Galván (1), que posteriormente publicó otros trabajos con consideraciones relativas a la docencia (2) y la industria (3).
De 1980 a 1987 se publicaron noticias relacionadas con la Ingeniería Biomédica en la sección “Biomundo”, de la revista “Mundo Electrónico”, con periodicidad bimestral, para promover el conocimiento de la ingeniería biomédica.
J. Márquez-Montes y J.L. Monteagudo (4) analizaron en 1985 la situación de la Tecnología Sanitaria en España. R. Pallás (5) analizó en 1988 diversos programas docentes de Ingeniería Biomédica que se impartían en Europa y EE.UU. P. Caminal y col. (6) en 1990 describieron seis años de docencia en máster y postgrado en Bioingeniería en la Universitat Politècnica de Catalunya.
3. Primeros congresos
En 1980 se constituyó la Agrupación Española de Bioingeniería (AEB), siendo Gabriel Ferraté el primer Presidente de la Junta Directiva y Jesús Galván el primer Secretario, durante el periodo 1980-85. La AEB organizó las Reuniones Anuales de la AEB (Barcelona 1980, Madrid 1981, Barcelona 1982, Sevilla 1983, …). Asimismo, y con carácter internacional, organizó la Conferencia Iberoamericana de Bioingeniería (Gijón 1985) y la IV Mediterranean Conference on Medical and Biological Engineering (Sevilla 1986).
Casi simultáneamente, el Colegio Oficial de Ingenieros de Telecomunicación, la ETSITM y la ETSITB organizaron los International Symposium on Biomedical Engineering (Madrid 1981, 1983, 1987, Peñíscola 1991 y Santiago Compostela 1994).
La Agrupación Española de Bioingeniería (AEB), constituida en 1980, pasó a denominarse en 1995: Sociedad Española de Ingeniería Biomédica (SEIB).
La SEIB organizó, aglutinando la Reunión Anual de la AEB y el International Symposium on Biomedical Engineering, los Congresos Anuales de la Sociedad Española de Ingeniería Biomédica (CASEIB): Pamplona 1996, Valencia 1997, Valencia 1998, Barcelona 1999, Cartagena 2000, …
4. Primeras estructuras de investigación
En 1976 se fundó el Instituto de Biomecánica de Valencia (IBV), centro concertado entre la UPV y el Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (IVACE).
En 1976 se creó la Unidad de Bioingeniería, en el Hospital Ramón y Cajal, y el Laboratorio de Informática y Cibernética Médica, en la UPM.
En 1982 se constituyó la Comisión de Bioingeniería entre el Hospital de la Santa Creu i Sant Pau, de Barcelona, y el Institut de Cibernètica (UPC-CSIC), con el fin de promover la colaboración en ingeniería biomédica entre ambas instituciones.
En 1983 se creó la primera Cátedra de Bioingeniería en España (ETSIT-UPM), asumida de forma interina por el profesor Francisco del Pozo, quien fundó en 1986 el Grupo de Bioingeniería y Telemedicina de la UPM.
5. Nuevas estructuras de investigación en el periodo 1996-2000
En este periodo se crearon la Red Temática en Ingeniería Biomédica (REDINBIO) y la Red Temática de Tecnologías de Apoyo a la Discapacidad y Mayores (RETADIM), aglutinando la mayoría de grupos españoles trabajando en esos temas. Las actividades fueron financiadas por la Comisión Interministerial de Ciencia y Tecnología (CICYT).
Asimismo se vio la necesidad de potenciar la colaboración entre grupos de investigación de una misma universidad, creándose los siguientes centros: Centre de Recerca en Enginyeria Biomèdica (CREB UPC), Centro en Red de Ingeniería Biomédica (CRIB UPV) y el Centre de Bioelectrònica i Nanomedicina (CBEN UB).
6. Evolución del número de publicaciones de investigadores españoles
La tabla adjunta muestra el número publicaciones de investigadores españoles citadas en Scopus (7), agrupadas en periodos de 5 años. Destaca el ritmo creciente y continuado a lo largo de este periodo de 25 años. Este crecimiento fue debido al incremento del número de grupos de investigación dedicados a este sector, pero principalmente a la calidad de la investigación y a comprender la importancia de publicar en revistas internacionales.
7. Primeras actividades docentes
En el año 1984 se puso en marcha el Postgrado en Bioingeniería en la UPC y unos años más tarde el Postgrado en Bioingeniería en la UPM y la UZ.
La Intensificación de Bioingeniería, en los estudios de Ingeniería de Telecomunicación (UPM), se inició también en el 1984.
En el 2000 se puso en marcha la Intensificación en Ingeniería Biomédica, en los estudios de lngeniería Técnica Industrial (especialidades Mecánica, Eléctrica, Electrónica y Química), en la UPC.
8. Mi experiencia personal
Mi primer contacto con la ingeniería biomédica fue en 1976 con el inicio de la tesis doctoral en el Institut de Cibernètica (UPC-CSIC), bajo la dirección del rector Gabriel Ferraté. En aquella época realizaban su investigación en el Institut de Cibernètica (IC), en el campo de la ingeniería electrónica, el profesor Josep Amat y los becarios Alicia Casals y Ramón Pallás, que posteriormente han sido figuras destacadas en el campo de la ingeniería biomédica.
En la década de los 70 era muy reducido el número de publicaciones españolas en revistas internacionales. La colaboración de investigadores españoles con grupos extranjeros de prestigio, a partir de los 80, ayudó a incrementar de forma muy significativa este número de publicaciones. A modo de ejemplo, las ayudas conseguidas por el IC para financiar los cursos en la UPC de los profesores N. Thakor (Johns Hopkins University) y J. Webster (University of Wisconsin), fue el inicio de una provechosa colaboración. Por otra parte las Acciones integradas de investigación científica y técnica con Francia y Alemania facilitaron una colaboración duradera con los profesores H. Rix (Université de Nice Sophia Antipolis) y A. Voss (University of Applied Sciences Jena).
Una experiencia muy enriquecedora en 1983 fue promover la colaboración entre los grupos de la UPC que en aquellos momentos trabajaban en ingeniería biomédica, con el fin de potenciar la investigación, el desarrollo tecnológico, la innovación y la transferencia de conocimiento a empresas, hospitales y entidades relacionadas con las tecnología de la salud. Este espíritu de colaboración dio lugar a la fundación del Centre de Recerca en Enginyeria Biomèdica (CREB), aglutinando en aquella época a cinco grupos de investigación. La aparición posterior de nuevos grupos de investigación en ingeniería biomédica en la UPC ha posibilitado su incorporación al CREB, cubriendo actualmente nueve áreas temáticas.
La puesta en marcha del Postgrado en Bioingeniería en la UPC en el 1984 resultó una experiencia muy gratificante, consiguiendo reunir en el equipo de profesores a los mejores especialistas que en aquella época había en cada ámbito de la ingeniería biomédica en Catalunya. Esta colaboración docente fue un éxito debido principalmente a la calidad humana de todos los docentes y a la excelente relación con el equipo coordinador del postgrado.
He sido afortunado en poder acompañar los trabajos de investigación que dieron lugar a las tesis doctorales de Francesc Clarià, Beatriz Giraldo, Pedro Gomis, Raimon Jané, Pablo Laguna, Miguel A. Mañanas y Montserrat Vallverdú, todos ellos han realizado posteriormente importantes contribuciones en la investigación, docencia y gestión universitaria, y con todos ellos continúa una gran amistad.
9. Referencias
1. J. Galván (1978) “La rentabilidad del ingeniero en el medio hospitalario”. Mundo Electrónico, 70, 55-56.
2. J. Galván (1978) “La ingeniería biomédica en España: propuesta de solución a los problemas de la enseñanza”. Mundo Electrónico, 74, 69-72.
3. J. Galván (1979) “La industria española de electromedicina”. Mundo Electrónico, 82, 23-32.
4. J. Márquez-Montes y J.L. Monteagudo (1985) “Tecnología y Salud. Bases para una planificación en ingeniería clínica, investigación y desarrollo industrial”. Consejería de Salud y Bienestar Social. Comunidad de Madrid.
5. R. Pallàs (1988) “La formación en Ingeniería biomédica: Algunas experiencias”. Mundo Electrónico, 185, 51-57.
6. P. Caminal, R. Jané y col. (1990) “Máster y postgrado en Bioingeniería. La experiencia de la UPC”. Mundo Electrónico, 209, 107-112
7. https://www.elsevier.com/solutions/scopus